Último tren a Alemania | día 10
Circulando por las carreteras rusas se entiende por qué se usan tanto los trenes en este país. En Cherepovéts nos hacemos famosos, todos se sacan fotos con nosotros, parece que nunca antes han llegado sudamericanos a estos lares. Lo cierto es que la ciudad apenas tiene el encanto de su vieja estación fluvial, ya abandonada, donde se juntan los jóvenes a contemplar el río y vaciar botellas enteras de vodka.
El fútbol lo vuelve a poner Bélgica. Se hace un festival con Túnez. Eden Hazard mete dos, el primero de penal, y Romelo Lukaku otros dos, convirtiéndose en el goleador del Mundial junto a Cristiano Ronaldo. En el segundo de Lukaku hay que sacarse el sombrero frente a la asistencia de Meunier. El quinto lo metió Michy Batshuayi, que entró para darles descanso a los titulares. Los tunecinos también se quisieron apuntar a la fiesta y marcaron por intermedio de Dylan Bronn y Wahbi Khazri para maquillar el resultado con un 5 a 2 que convierte a los belgas en el equipo más goleador, junto a los rusos.
México, por su parte, cumplió frente a Corea del Sur, pero se quedó corto en el marcador. Abrió la cuenta Carlitos Vela con un penal por mano en un centro atrás de Guardado, y el “Chicharito” Hernández metió el segundo después de otra corrida hermosa del “Chuky” Lozano. Pero esta vez el ingreso de Rafa Márquez no le dio el equilibrio esperado a los mexicanos, y Son Heung Min, el talento coreano del Tottenham inglés, metió un golazo desde afuera el área que puso un 2 a 1 en el marcador que le obligará a México a trabajar el último partido para clasificarse a los Octavos de Final.
El gran partido de la jornada lo protagonizaron Alemania y Suecia. Los suecos, después de eliminar a Holanda e Italia camino del Mundial, tenían hoy la oportunidad de eliminar a los alemanes. Y muy pronto demostraron que tenían las intenciones de hacerlo, aprovecharon una mala entrega de Kroos que nos sorprendió a todos, y asistieron a Ola Toivonen, que definió por encima de Neuer para sembrar el pánico en los germanos. Joachim Löw salió disparado a los vestuarios para replantear la estrategia del Campeón del Mundo.
Su fútbol no tiene muchos secretos. Diagonales hacia afuera de los delanteros para recibir con ventaja y centrar atrás, y llegada en oleadas de un delantero centro y varios centrocampistas. Werner es el especialista en las diagonales, y ganó por izquierda. Marco Reus el centrocampista que siempre llega, y la empujó como pudo para empatar el partido. Pero el punto no le alcanzaba a Alemania, y Suecia siguió seria y ordenada, tanto así que forzó la expulsión de Boateng. 10 minutos y 10 jugadores para conseguir la hazaña. ¿Cómo? Timo Werner hasta el fondo por la izquierda, falta y tiro libre. Es la última jugada, todos los tanques alemanes al área. Pero el cirujano Toni Kroos es distinto, el único distinto que tiene Alemania en este Mundial. Desde un ángulo casi imposible, ejecuta el tiro libre al ángulo izquierdo de Robin Olsen, que no puede hacer nada por llegar. Es el 2 a 1 para Alemania. Ahora la clasificación pasa por una victoria contra Corea del Sur, los Campeones del Mundo siguen dependiendo de sí mismos.
Andrés Margolles. Cherepovéts, 23-06-2018
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