Bang, bang

El humano no puede ser tan perfectamente humano para llegar a sentirse un Dios… Podría haber una sublevación

 

Bang, bang

Tengo la cruel sospecha
de que el corazón iba en el cerebro
y el cerebro en el corazón.
Así era antes de los siete días,
antes del big bang,
antes del cataplum,
del crash,
del spash,
del Boom,
del plaf,
crunch,
tap tap,
bang, bang.

Ahí estaban,
el corazón,
el cerebro,
cada uno en su lugar
como tenía que ser,
tan perfecto,
tan perfectamente humano,
se pensaba con el corazón,
con el cerebro se abría el pecho
y se lograba, antes se lograba
entrelazar las diferencias en un abrazo
y viéndonos a los ojos
se sentía la razón
palpitando en la cabeza.

Pero un día,
Dios, un ente
y la naturaleza
se juntaron,
y nos hicieron la jugarreta
de cambiarlos de lugar,
el humano no puede ser tan perfecto,
tan perfectamente humano
para llegar a sentirse un Dios,
un pequeño pedazo del cielo,
una gota del mar que lo une todo.

¡Andáte pues!
déjame el corazón en el pecho
y el cerebro en la cabeza,
pero que tontería,
hemos vuelto renovados
para los siete días,
para el big bang,
para el cataplum,
el crash,
el spash,
el Boom,
el plaf,
crunch,
tap tap,
bang, bang.