Lástima, qué lástima | blog Mundial Brasil 2014
Hace poco dejé por escrito una idea que puede resultar chocante, pero que no por eso deja de ser cierta: en una competencia como la copa mundial de fútbol sólo hay un ganador, el resto de los competidores son, al final, todos perdedores. Sin embargo, me es imposible evitar sentir como propios la angustia, la ansiedad, la felicidad y el dolor de algunos de esos perdedores. El viernes me pasó con Colombia, hoy me pasó con Costa Rica. Será porque soy argentino, y a pesar de saber que fuimos, somos y seremos siempre los mejores del mundo, también sé que hace 28 años que ganamos la última copa del mundo y que hace 24 años que ni siquiera llegamos a semis, y, teniendo en cuenta que tengo 36 años, eso me hace un experto en esto de irse del mundial con las manos vacías. Todavía me acuerdo, o mejor dicho, todavía me duele aquella final del noventa en Italia. Cómo no me van a doler Codesal, el penal y el segundo lugar, si ser segundos es lo mismo que ser el mejor de los perdedores, nada más. Y al mismo tiempo me siento orgulloso de lo que hicimos en ese mundial, no sé, quizás sea demasiado sentir orgullo, o quizás no. Pero no estoy aquí para hablar de Argentina, estoy aquí para a hablar de Costa Rica y de su última presentación en Brasil.
Holanda vs Costa Rica, cuartos de final, Brasil 2014. Holanda es la eterna candidata al subtítulo, aunque para algunos, esta vez, también es candidata al título. El seleccionado de Costa Rica es el muerto caminante del grupo de la muerte, de hecho, es el único que queda en carrera y llega a cuartos por primera vez en su historia, y, además, invicto.
Como ustedes ya sabrán, este partido terminó cero a cero y se definió el pase a semis por penales, eso nos da poco más de 120 minutos que pueden resumirse en pocas palabras Holanda intentando, Costa Rica aguantando y, de vez en cuando, contraatacando. Puedo, si quieren, ser un poco más específico. A Holanda le queda grande el mote de candidato, sin embargo, cuenta con muy buenos jugadores, incluyendo a Robben, que además de actor y clavadista, es un gran futbolista, también cuentan con un cuerpo técnico capaz. Así que aguantarle a Holanda durante 120 minutos no es nada fácil, si no me creen, pueden preguntarle a México, que no aguantaron y les dieron vuelta el resultado con un gol y un penal mal cobrado y se volvieron a casa en octavos.
Costa Rica tuvo en Navas su punto más alto, extraordinario el arquero, tapó todas a todos, que no fueron más porque el equipo entero hizo una gran tarea en defensa, supliendo lo que les faltó de técnica con garra. Pinto sabía lo que hacía con los jugadores que tenía, y todo el equipo, incluyendo al cuerpo técnico, supieron mantener los pies sobre la tierra. Siempre respetaron a sus rivales, faltándoles al mismo tiempo el respeto. Y, la verdad, pudieron llegar más lejos, lástima que tuvieron que jugarse el pase en los penales, lástima que Holanda tiene un arquero suplente especialista en penales, que adivinó todas y atajó dos, lástima que Navas no atajó ninguna. Lástima, qué lástima, porque los ticos ya se fueron. Pero que quede claro, perdieron, pero perdieron de pie, como sólo los héroes saben hacerlo.~
Hola Rubén,
Muy buen artículo, creo que todos nos sentimos un poco identificados con los “ticos”, y muy poco con ese arquero petulante que clasificó a Holanda.
Eso sí, no estoy de acuerdo con que haya estado mal cobrado el penal que le hizo Rafa Márquez a Robben, a mí me pareció clarísimo.
Suerte a la Argentina!
Gracias por el comentario, Carlos. Con respecto al penal, creo que quedará en la historia como algo que fue y no fue, según a quién le preguntes. Es como el penal que sancionó Codesal en el ’90, que no fue, pero fue, o la mano de Maradona con los ingleses, que fue mano, pero fue gol, porque fue la mano de Dios.
Un abrazo.