Reporte Gráfico: El sexo en la publicidad
El sexo dentro de la publicidad es, sin duda, una estrategia que apela a la seducción, el deseo y las obsesiones, es decir, a la satisfacción de un placer. A través de imágenes más o menos explícitas, imaginación y humor, las marcas establecen una relación entre sus productos y el placer. Tratan de hacernos ver que comprando y usando sus productos, los deseos y obsesiones estarán más cerca de cumplirse. Este artículo grafico presenta la publicidad de algunas marcas y sus distintas formas de acercarnos al sexo.
Sin duda: Importa y mucho… El whisky “Cutty Sark” no sólo nos afirma esta cuestión, va mas allá y nos sugiere el tamaño indicado, por lo menos, para no volverse a plantear esta pregunta y pasar a la acción.
El efecto “Axe” nos dice que no sólo se garantiza un matrimonio feliz, pero la frase -vivieron felices para siempre- adquiere otra connotación y de dos personas se pasa a por lo menos cinco. Aunque dudamos mucho que la novia “original” esté contenta.
Para “Givenchy” no existen lugares para el deseo, sólo momentos. Los mensajes no siempre establecen la relación directa con el sexo. La ambigüedad viene al tratar de determinar si es él quien debe ir por la chica o es ella quien irá por él.
Para “Nobel” los mensajes ambiguos y contradictorios son su forma de comunicarse. En este caso no debes buscar, sólo esperar disfrutando de los cigarrillos, pues te encontrarán.
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“Magno” invita a desearlo, sin saber muy bien qué es lo que debemos desear: si la botella de brandy o la chica, que ahora ha sido nombrada “nuevo patrimonio de la humanidad”
La relación entre el objeto de deseo y los productos que vende “Lacoste” es directa. Evidentemente el anuncio va dirigido al público femenino.
“Gaultier” une a un marinero, común fantasía del sexo femenino, con una hermosa chica, prototipo del sexo masculino. Todo ello en un perfume que tiene la imagen y forma, sea cual sea el sexo al que se pertenece, del objeto de deseo.
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Para “Gasoline” las insinuaciones dan lugar a los juegos de poder, exigencias y súplicas, en la imagen su juega con el sueño masculino de sumisión.
Aquí “D’Orsay” nos invita a volar la imaginación y fija los distintos gustos y deseos en las relaciones sexuales. Gustos que pasan por el dominio de un “burrito”.
Se pueden abordar los temas con “puro ingenio” de “Smirnoff” donde se deja por entendido el apetito sexual y se pasa a mostrar como se pueden resolver los problemas derivados…
En el mejor de los carteles aquí mostrados. “Moet” se las ingenia para establecer la relación entre el sexo y su producto. No hacen falta palabras ni explicaciones.~
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