Dos textos
Dos textos de Annabelle Verhaeghe/ traducción de Bérénice P. y Diego Martínez
Una vueltita
ven conmigo vente conmigo y tomemos la autopista yo estaré a tu lado te miraré vente que iremos lo más lejos posible lo más rápido posible y cuando nos quedemos sin gasolina dejaremos el auto allí parado y haremos auto-stop con camioneros gordos los más asquerosos que encontremos los provocaremos con delicadeza y los pobres no entenderán nada y apenas se acerquen a nosotras apenas descubran la treta nos haremos pequeñitas y será más espantoso aún y temblando sacaremos un spray de gas pimienta una miserable bombita de 15 mililitros con su ridícula bandera francesa y su clavija de plástico torcida, te dejaré hacerlo si quieres y entonces temblarás y yo lloraré o viceversa, como quieras, y yo tendré secretamente en mi mano tendré listo en mi mano un cuchillo escondido en el fondo de mi bolso, el cuchillo de los sacrificios de fuego que además estará cubierto de combustible porque una nunca sabe hasta dónde puede llevarnos todo eso, porque una nunca sabe cuándo podríamos necesitar de un cuchillo en llamas, por eso es que siempre llevo un encendedor conmigo, y si nos dejan amablemente en algún sitio, si son amables con nosotras nos iremos directamente a cualquier parque en busca de yonquis para drogarnos con ellos y azuzar a los perros y acosarlos hasta que muestren los dientes tan sólo para que suba un poco la presión, sin maldad alguna, pero cuando los yonquis se pongan a gritarles como suelen hacerlo, porque habremos elegido al grupo correcto, a los estúpidos correctos, entonces les diremos sus verdades en la cara a ese montón de yonquis que tienen perros como la gente tiene televisores que encienden apenas llegan a casa, pero los perros no son objetos, ¡mierda! ¡uno tiene que tratar de entenderlos, mierda! ¡es por eso que uno elige tener un perro, mierda! ¡Cambien su mentalidad y dejen de ser tan patéticos! Y luego dependiendo de lo que suceda decidiremos qué hacer, aunque es muy probable que nos larguemos del parque riéndonos como tontas y luego te propondré que vayamos a comprar mucho alcohol del apestoso y lo beberemos tranquilas mirando la puesta de sol desde un techo, intentaremos entrar en un inmueble probando con todas las puertas de entrada hasta que encontremos una abierta que tenga acceso al techo, y luego treparemos por los tejados buscando alguna terraza, alguna ventana, algún apartamento donde instalarnos hasta oír la llave girar en la cerradura, esperaremos hasta el último momento antes de escapar sin que nos pillen, y si no encontramos nada nos quedaremos allá arriba bebiendo y simulando que nos tambaleamos agarrándonas las dos y pegando grititos agudos como pequeñas urracas y espiando a la gente en sus casas acercándonos a ellos hasta llegar al vértigo y cuando se haga de noche quemaremos nuestras bragas y nuestros corpiños arrojándolos allí abajo, en la calle, y las cenizas de nuestra ropa interior y de las partículas de nuestras pieles y de nuestros fluidos sagrados caerán sobre las cabezas de la gente como en un invierno nuclear, ¡oh!, y después nos iremos a una disco, ¡oh tú!, a sitios oscuros, y ya no seremos tan ligeras y sutiles, seremos provocadoras y traidoras, y bailaremos hasta sentir sus pijas y entonces, el objetivo entonces será pescar a los más feos, a los malvados, a tipos sucios con ojos de loco y aliento áspero, y ahí, ahí tendremos que pegarles en los huevos, tendremos que machacarles los huevos, sí, sujetándolos con fuerza de manera que no puedan escapar, golpearlos con las rodillas con todas nuestras fuerzas delante de todo el mundo mientras bailamos y gritamos, como si estuviéramos en trance, tú me entiendes, todo muy chamánico, la música desaparecerá y no escucharemos otra cosa que no sea nuestra sangre en los oídos y los comentarios estupefactos de la gente alrededor de nosotras, tan sólo un momento, y luego los quejidos y los insultos y sus intentos por agarrarnos, a nosotras que somos tan pequeñitas, tan bonitas, tan temerosas, y si conseguimos escapar de esa, si acaso logramos escapar de esa, saldremos a la calle corriendo a ras del suelo hasta llegar a uno de esos callejones sin salida en donde mea la gente por la noche, llegaremos hasta la pared del fondo, y allí nos follaremos, contra la pared, contra los autos, contras las puertas y las ventanas, tiradas en el suelo.
***
Mi jauría me espera
ESTOY BUSCANDO A mi jauría.
Mi jauría me espera en alguna parte que me espera en alguna parte,
Mi jauría me espera en alguna parte que me espera en alguna parte,
Mi jauría me espera.
Yo sé que me espera,
Mi jauría me espera,
Está claro.
Y yo estoy buscando a mi jauría,
Mi jauría me espera y yo la busco,
La busco para no hacerla esperar que me espera.
Mi jauría me espera y yo espero encontrarla buscándola,
Buscándola espero.
Mi jauría me espera.
Me jauría me espera en alguna parte,
Mi jauría está en alguna parte esperándome.
Mi jauría no me busca,
Mi jauría me espera.
Mi jauría me espera en alguna parte,
Y yo la busco en alguna parte en todas partes.
Estoy buscando a mi jauría cada día estoy buscando a mi jauría.
Creí tener mi jauría en un momento creí que había encontrado a mi jauría en un momento pero era mentira,
era mentira.
En un momento creí que había encontrado a mi jauría en un momento pero éramos dos,
Éramos dos y de a dos todavía no somos una jauría,
O somos una jauría gastada, escapada de una batalla mortal contra algún enemigo, en fuga, tuerta, arrastrando una pierna, despedazada. Una jauría a la que le faltan los miembros. De a dos no se es una jauría.
De a dos,
De a dos es una pareja, y una pareja no es una jauría.
Para tener una jauría hacen falta los miembros,
Los miembros de la jauría.
Y así como el cuerpo necesita de sus órganos,
Así la jauría necesita de sus miembros.
Y son al menos tres,
al menos.
El cuerpo puede vivir sin un brazo
El cuerpo puede vivir sin una pierna
El cuerpo puede vivir sin un brazo y una pierna y un brazo
Y una pierna
Pero sin el corazón no puede
Sin los pulmones no puede
Sin el hígado no puede
Los miembros de la jauría son los órganos de la jauría
Los miembros de la jauría son importantes para la jauría
Los miembros de la jauría son la jauría
Los miembros de la jauría tienen un orden el orden de la jauría,
Y el orden hace a la jauría.
En ese orden yo quisiera ser Alfa,
Porque todo el mundo quisiera ser Alfa,
La jauría es el deseo común de ser Alfa.
Aaa Aaaa Aaaaalfaaaaa
Ser Alfa para reproducirse,
Quiero reproducirme en la jauría y para poder reproducirme en la jauría necesito ser Alfa.
Pero ser Alfa es peligroso, ser Alfa es arriesgado,
Porque todo el mundo quiere ser Alfa y te expulsarán si eres Alfa.
Entonces quizá prefiero no ser Alfa
Quizá incluso prefiero ser menos que Alfa
Quizá incluso prefiero ser menos que Beta que está por debajo del Alfa en la jauría, quizá incluso menos que un simple Omega aun si todos lo acosan, con tal de encontrar a mi jauría,
Y que encuentre mi lugar.
El orden se instalará por sí solo.
Y quizá en mi jauría todo el mundo podrá reproducirse si así lo quieren
Quizá en mi jauría habrá presas suficientes para que todo el mundo sea Alfa en mi jauría,
Y quizá votaremos u organizaremos grandes torneos para tomar decisiones,
Quizá mi jauría será aquí todos somos Alfa,
Será una jauría democrática.
Sí, será una jauría democrática, quizá.
Qué me impide pensar que sea posible
que contamos con los medios
Sin embargo sin embargo aun si todo el mundo es Alfa siempre habrá un Alfa+,
Un A+ y un A-,
y está bien.
Porque la jauría es el orden, el orden es la jauría.
El orden es importante/ el orden dirige la vida,
Si no tengo orden cómo voy a dirigir mi vida.
Por ejemplo en este momento no tengo el orden pero estoy buscando a mi jauría y buscar también dirige mi vida,
Entonces debería bastarme con buscar a mi jauría.
Debería ser suficiente.
Pero buscar es haber perdido algo o buscar es moverse siempre o buscar,
Finalmente,
Es fastidioso.
Cuando uno está buscando no puede descansar
Cuando uno está buscando no puede elegir
Cuando uno está buscando no se puede reproducir
Y yo quiero reproducirme pero no he encontrado mi jauría,
Entonces busco a mi jauría y no me reproduzco.
Es así: estoy obligada a buscar y a no reproducirme para intentar encontrar a mi jauría para que pueda reproducirme cuando la haya encontrado pero quizá tampoco pueda reproducirme por culpa del orden, si no soy Alfa, pero no importa; quiero decir, que lo más importante es la jauría, y luego la reproducción.
Ya veremos.
Puesto que reproducirse es un medio para perpetuarse y el orden es un medio aun más seguro,
porque el orden perdura.
Y buscar tiene como finalidad encontrar pero el orden tiene como finalidad el buen desenvolvimiento de la vida,
Que no tiene final.
Salvo aquella que uno deja de ver una vez que está muerto.
Pero aún muertos el orden perdura en los otros,
Los integrantes vivos de la jauría
Porque ya muertos seguimos siendo miembros de la jauría.
La jauría permanece con nosotros y después de nosotros.
Ella no abandona a sus muertos.
Y detrás de nosotros, dejamos el buen desenvolvimiento de la vida,
Que no tiene final.
Es por eso que busco a los otros,
A los miembros de la jauría,
Para instalarme en el orden que no tiene final.
Porque a los ancestros uno los olvida,
La reproducción sólo es buena para la genética.
Y me sentiré halagada al ser elegida para la genética de la jauría, al ser Alfa,
pero es el orden lo que busco, y no descendientes.
Prefiero el orden que la reproducción.
Prefiero el buen desenvolvimiento de la vida en jauría que ser Alfa.
Ya lo dirá la jauría.
Y quizá yo también prefiera que elijan por mí.
Quizá sea mucho mejor que elijan por mí.
Quizá sea mejor, al final.
Quizá a mi jauría yo la busco para que elija por mí.
Por ejemplo, ¿es que acaso yo elijo a mi jauría? No. No.
Es ella quien me elije.
Yo estoy buscando a mi jauría pero será mi jauría quien me encontrará, ella, mi jauría.
Mi jauría me espera en alguna parte que me espera,
Mi jauría me espera.~
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