Perú: Volvieron los guerreros | Rusia 2018

Por Rolando Mendoza

HAN TENIDO QUE pasar 36 años para que mis ojos puedan ver en directo a una selección peruana clasificada al mundial y a vísperas de disputar un partido amistoso con la selección de Suecia. Hasta entonces, he sido testigo de muchas frustraciones y derrotas, los peruanos nos habíamos mal acostumbrado al maldito consuelo de que siempre jugamos bien pero no ganamos. No basta con jugar bien, de qué sirve jugar tocar y tocar, gambetear y dar 20 pases de tacón si no se consiguen los objetivos; miremos a selecciones como Uruguay o Italia que, sin ser un prodigio de vistosidad, casi nunca fallan a su cita con el Mundial. Ahora, enfundado en mi camiseta peruana de la eliminatoria para el Mundial 2002 me dispongo a ver el Suecia-Perú. Será el último amistoso del Perú ante una selección de calidad. Los suecos han estado presentes hasta en 12 Mundiales y  en su clasificación dejaron de lado a un histórico como Italia, por lo tanto es un rival de entidad.

La selección del Perú está haciendo una fase de preparación muy ilusionante para el país. No ha perdido ningún partido hasta ahora, todos los encuentros han terminado en victorias. Y  a partir del partido contra Arabia Saudí podemos contar con nuestra máxima estrella, nuestro goleador histórico y héroe nacional: Paolo Guerrero. Un jugador que con sus goles y su juego se puso a esta selección a la espalda y nos llevó a la ansiada repesca. ¿Así cómo se le puede pedir a todo un país que se lo tome con calma?, simplemente no se puede.

Paolo es un jugador que no se había visto en décadas en nuestro país: su juego hace gala de su apellido, es un guerrero que lo da todo en la cancha, que corre y sangra por la camiseta, que guapea cuando tiene que levantar al equipo, que sufre como sufrimos los millones de peruanos que disfrutamos de este deporte cada vez que perdemos; un jugador que a sus 34 años, no quiso dejar escapar la que sea tal vez su última opción de ir a un Mundial. Un jugador que ha superado largamente a nuestro anterior goleador histórico y símbolo de ese pasado grande que ­–se dice­– una vez tuvo el futbol peruano, Teófilo Cubillas. A hora haré de futurólogo y presagio que las generaciones siguientes verán a Guerrero como el nuevo símbolo nacional, ¡sí, al lado de la bandera y el escudo!

Otro puntal de nuestra trabajada clasificación es sin duda el técnico Ricardo Gareca, ex internacional con Argentina y responsable del gol agónico que nos apartó del Mundial de México 86.  Ahora como entrenador, nos ha llevado a nuestro 5to mundial. Gareca ha logrado un equipo compacto, donde no hay figuras. Un equipo ordenado que defiende y toca bien el balón. Arriba cuenta con delanteros fiables, que anotan partido a partido, siendo el único titular indiscutible Paolo Guerrero. Gareca ha encontrado su equipo, a nombres conocidos como Guerrero, Farfán, Rodríguez y Carrillo se han sumado un grupo joven, nuevos jugadores con buen pie: Cueva, Flores, Tapia, Yontún, Ruidíaz, Hurtado; un medio campo trabajador. En la defensa la dupla de centrales Ramos y Rodríguez parece innegociable. Los volantes defensivos han ido rotando en función del rival donde Trauco y Corzo se perfilan como titulares. En la portería creo que a estas alturas nadie duda que Gallese es titular, se lo ha ganado con sus actuaciones, aunque Cáceda también ha rendido cuando se le ha necesitado.

De vuelta al partido con Suecia, el encuentro se disputará en la ciudad de Gotemburgo. Una ciudad pequeña, muy bonita y muy tranquila si se le compara con la locura que es la ciudad de Lima y sus 10 millones de habitantes. Como degustador de rock, mis referencias con Suecia me acercan mucho a su música, he disfrutado de muchos grupos suecos de todo tipo (progresivo, hard rock, aor, power, sinfónico, gótico, death, indie, etc.) pero hoy estoy en la ciudad y en el estadio no por la música sino por ver a mi selección.

Han pasado 36 años, y en Suecia volveré a oír nuestro himno entonado por miles de personas que seguramente, al igual que yo, han sufrido y se han desilusionado. Pero todo eso ya pasó, estamos aquí para alentar, para ver a la blanquirroja nuevamente en un Mundial, estamos de vuelta y avisando… ¡volvieron los guerreros!