RUS-SAU: Rusia, hora de hacer historia | Rusia 2018

Por Nacho Espínola

YA EN EL  primer día del mundial ha habido algunas sorpresas, tanto dentro como fuera de la cancha. Fuera, -la ceremonia previa duró solamente 30 minutos- con varias canciones de Robbie Williams y Natalia Vodianova una tenor muy conocida para el público local, dejando de lado las larguísimas ceremonias de los mundiales anteriores. A nivel de organización, en el próximo mundial habrán  48 equipos contra los 32 de hoy en día y, por último, está el VAR, que aportará claridad en las jugadas dudosas al revisarlas por video. Dentro, en la cancha, también tuvimos novedades, la selección local acaba de tener el mejor inicio de un organizador del mundial de los últimos 20 años. Con  5 goles contra una débil Arabia Saudita que manejó el balón bastante bien, contando con el 60% de la posesión en el partido y haciendo casi el doble de pases que la selección local –unos 560 contra 350-, no pudo hacer nada frente a la buena defensa rusa y su falta de creatividad en los últimos metros en la cancha.

Rusia formó con el portero Akinfeev, referente y capitán del equipo con más de 100 partidos jugados para la selección; línea de 4 con Zhirkov, Kutepov, Ignasevic que ha vuelto a la selección y Mario Fernandes, jugador brasilero que llego a remplazar a Dani Alves en la cararinha y nacionalizado ruso por un decreto presidencial en 2016; zona de volantes, línea de 5 con Gazinsky, Samedov, GolovinZobnin y Dzagoevy por último; y un único punta con Smolov, que de antemano era la esperanza de gol del equipo y uno de los jugadores más hábiles con el balón. Arabia Saudita utilizó el mismo 4-5-1 dejando de punta a su jugador más conocido y estrella, Al Shehri, que se dedicó a pelear cada pelota, pero también se lo vio protestar en demasía.

Ya desde el arranque, la impresión fue que los rusos, con muy poco juego y una propuesta de juego mas conservadora, esperando recuperar balones y salir a la contra, iban a ganar el partido. Son superiores a los jugadores de Arabia Saudita a nivel táctico pero, y más importante en este partido, a nivel físico. La diferencia era notoria y en un juego donde ninguno tuvo un jugador que despuntara por su habilidad, estos dos factores fueron clave.

A los 8 minutos, el mediocampista Gazinsky abrió el marcador con un buen cabezazo que el portero Saudi Al-Mayoof no pudo retener. Los saudíes no se achicaron y fueron al frente con mucha velocidad y buen toque, pero el equipo ruso supo controlar al rival en base a su buena defensa y juego físico. Ya a los 23 sonó la alarma cuando Dzagoev  tuvo un tirón en medio de una contra que pintaba muy bien para Rusia. El reemplazante fue Denis Cherishev, ex jugador del Madrid, más conocido por haber sido incluido por error por Rafa Benites en la copa del Rey y haber dejado al Madrid expulsado de la misma que por su propio éxito deportivo. Sin embargo, el ahora jugador del Villareal, pudo meter un golazo en el minuto 30 del partido luego de levantar la pelota frente a dos defensas saudíes que, tirándose al piso, pasaron de largo permitiéndole al jugador mandar un sablazo al ángulo del golero que nada pudo hacer. A partir de allí, el equipo ruso se dedicó a esperar a los saudíes, administrar fuerzas y salir muy rápido en las contras. El primer tiempo del mundial se despidió con una imagen mejor de lo que todos esperábamos de Rusia y, a la vez, peor de lo que se pensaba del equipo dirigido por el Hispano-Argentino Juan Antonio Pizzi.

En el segundo tiempo no hubo novedades en el juego, Rusia esperando y los saudíes intentando revertir el 2 a 0 en contra. El equipo de Pizzi se mostró inexacto en el área rival y hasta sorprendió que sus propios jugadores se dedicaron más a recriminarse entre ellos que a intentar a jugar. Con un punta muy solo y unos volantes que no pudieron nunca doblegar a los laterales rusos, el panorama no pintaba muy bien para el equipo que vistió de verde.

Los rusos siguieron haciendo su juego físico y táctico, de respuesta y velocidad, esperando cualquier tipo de error por parte del equipo rival. Así fue que en el minuto 69 el técnico decidió apostar por Dzyuba para remplazar al punta Smolov, que si bien tuvo algunas buenas jugadas durante el partido no logró concretar su gol. Dzyubaes, es un jugador mucho más físico, con 1.96 metros de altura, ideal para el juego aéreo, un grandote que pivotea para apostar a una segunda pelota y la llegada de los volantes. Un minuto después de su entrada, el jugador metió un buen gol de cabeza luego de un centro por la derecha de Golovin.

A estas alturas el partido ya estaba roto. Pizzi opto por sacar a su figura Al Shehri para preservarlo y el equipo se vino abajo ante la frustración por el resultado parcial. Tanto que en el minuto 91 en un contragolpe ruso Dzyuba pivoteo bajándole una pelota a Cherishev que metió el que será uno de los mejores goles de esta copa pegándole con el exterior del pie desde más de 30 metros venciendo al portero del equipo verde. Pero la fiesta todavía no estaba completa y en un contragolpe ruso el equipo saudíes fauleó al delantero local frente al área. El mediocampista Golovin clavó un muy buen tiro libre para meter el quinto gol de los locales y hacer historia para un país que desde la caída de la URSS no ha tenido ningún éxito futbolístico más allá de una semifinal en la Eurocopa del 2008 que terminó ganando España.

Ahora el equipo local deberá esperar a ver sus rivales que juegan mañana, con Uruguay-Egipto como primer partido del segundo día de la fiesta más importante del futbol mundial. Yo creo que Rusia tiene serias opciones de clasificar como segundo en el grupo, después de Uruguay, y luego de haber visto el resultado contra los saudíes. Tanto Uruguay como Egipto deberán meterle 5 o más goles para evitar en caso de algún empate en puntos, y quedar eliminados por diferencia de goles.

Creo que los saudíes, comandados por el argentino Pizzi, no tienen ningún tipo de chance de clarificar y van enfilados a quedar últimos en el grupo. Este grupo no dista mucho de aquel que perdió contra Alemania 8 a 0 en el mundial de Corea-Japón del 2002, mundial en el que se volvieron a casa con la canasta llena de goles,  12 en contra, y sin poder anotar un solo gol. Están a un nivel muy inferior y hoy quedo demostrado que, si bien intentaron jugar y proponer un juego de toque, rapidez y de iniciativa, la falta de calidad en el plantel queda en evidencia tanto al llegar al área rival como también en los errores de pérdidas de balones ante la presión rusa y la falta de agresividad en las pelotas divididas que tuvieron durante el partido contra, insisto, un rival que no fue nada del otro mundo. Los saudíes probablemente se retirarán de la copa como un grupo de buenos muchachos que vinieron a intentar no pasar papelones en su quinta participación en un mundial. Tendremos más ejemplos así en el próximo mundial cuando se sumen 16 países más a la copa.

Esperemos que a medida que el mundial se vaya desarrollando, el público local al que parece no interesarle mucho el evento se pueda sumar a la fiesta. Con el resultado de hoy [ayer, jueves] los locales pueden soñar con avanzar de fase y llegar a formar parte de los 16 equipos que definan el torneo. Rusia, en su mundial, comienza a hacer historia.