Intereses, ¡lo que hace el petróleo! Ed.14
Calicles: Está muy bien ser delgado en la medida en que se está creciendo y no es por tanto una vergüenza mostrarse escueto de carnes mientras se es joven; pero, si cuando uno es ya hombre de edad sigue siendo delgado, el hecho resulta ridículo, Sócrates, y yo experimento la misma impresión ante los que no han engordado que ante los que pronuncian mal o juguetean. Viendo a un joven delgado me complazco, me parece adecuado y considero que este hombre es un ser libre. Pero, en cambio, cuando veo a un hombre de edad que no ha ganado peso y sigue empeñado en mantenerse esbelto, creo, oh Sócrates, que este hombre debe ser azotado.
Platón, Gorgias