Adiós a los naranjas | blog Mundial Brasil 2014
Hemos tardado en asimilar lo que ocurrió la tarde de ayer en el primer juego de semifinales. Supongo que en Brasil aún siguen en shock. Aún parece difícil procesar la frustración y el enojo de la derrota, para eso faltan tiempo y ganas, tanto por lo que representa el juego en sí como por el contexto problemático en el que se lleva a cabo. Llegar a la final y ganar significaba para La canarinha que todo había valido la pena, incluso el derroche de dinero y las muertes que esta Copa ha traído consigo. Ya escuchábamos ayer entre sollozos a David Luiz, defensa de la selección brasileña y jugador del Paris Saint-Germain, pedirle perdón al pueblo brasileño, al que quería darle la alegría de la victoria. Victoria que se les fue de las manos y de la peor manera. Así, el de ayer es considerado el peor juego en la historia de la Selección brasileña.
Mientras, el segundo juego de semifinales disputado entre Argentina y Holanda fue complicado para ambos equipos, pero la verdad desangelado luego de lo que vimos ayer. Tan complicado, incluso aburrido, que no se pudo concretar ningún gol en los 120 minutos de juego y se definió en una serie de penales en donde perdió Holanda. Ambos jugaron bien, defendieron y tuvieron oportunidad de anotar gol, pero lo curioso es que todo protagonismo se volvió invisible: apenas algunas buenas llegadas de Messi y otras de Robben o Van Persie, que pareciera no estuvieron en la cancha.
Sin embargo, las esperanzas estaban puestas en Argentina, luego de 24 años de no llegar a una final: la última ganada fue en México ’86 contra Alemania, con quien luego volvería a enfrentarse en Italia ’90, quedando en segundo lugar; y también porque el partido coincidió con el festejo por el día de su Independencia, al que se suma el festejo de ganar y jugar la final contra Alemania el próximo domingo. Una revancha más.
Holanda, por su parte, se despide luego de un buen torneo y de demostrar por qué ha llegado tan lejos, pero siempre sin concretar la victoria: el mejor equipo subcampeón al que de nuevo se le niega la oportunidad de llevarse el título. Justo como en 1978, o casi, cuando Argentina le arrebató la victoria, luego de que Holanda llegará por segunda vez en su historia a la final de un Mundial, siendo esa la única ocasión en que los albicelestes le ganaran a Holanda en un partido mundialista, al menos hasta ahora.
El dato curioso de la tarde fue la duda por saber a quién apoyaba la argentina que reina en Holanda, Máxima Zorreguieta, quien suponemos se debatió entre apoyar a los naranjas o a los albicelestes. (En 1978, año en que Argentina le ganó la copa a Holanda, Máxima tenía apenas siete años.) Sin embargo, la reina hizo mutis y sólo se ofreció un comunicado en donde se decía que los reyes no asistirían al partido. Ahora suponemos que su apoyo en la final será para los argentinos, ¿o no?
Leave a Comment